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¿Cuál es la causa, la raíz, de la desconexión de nuestra motivación?

¿Cómo vamos hoy en día de eso? Con todo lo que estamos viviendo, parece que se nos queda lejos, ¿no? y que la desmotivación, toca nuestra puerta. 

Igual te haces estas preguntas…

¿Qué es la motivación? 

¿Pero cuál es mi verdadera motivación? 

¿Cuándo y cómo perdemos la motivación?

¿Cuál es la causa, la raíz, de la desconexión de nuestra motivación?

¿Cómo puedo reconectar con mi motivación?

 

¿Qué es la motivación?

Del término  “motivus” (movimiento) y el sufijo –ción (acción y efecto).

Según la RAE, una de las definiciones que da sobre motivación es:

“El conjunto de factores internos y externos que determinan, en parte, las acciones de una persona”.

Otros autores hablan de  “estimulación mental orientada hacia la consecución de un objetivo ”o de “la raíz dinámica del movimiento”.

Es aquello que nos hace cumplir nuestro objetivo.

Es la fuerza que nos hace actuar y nos permite seguir adelante incluso en las situaciones difíciles.

Es el proceso que inicia, guía y mantiene las conductas orientadas a lograr un objetivo o a satisfacer una necesidad.

Y ahora más que nunca, agarrarnos a nuestra motivación nos hará levantarnos y caminar hacia nuestro objetivo.

 

¿Pero cuál es mi verdadera motivación? ¿Qué es aquello que me motiva y me lleva a aspirar a objetivos?

Debes conocerte bien a ti mismo. Para ello hazte las siguientes preguntas que te propongo y contéstalas con total sinceridad, date tu tiempo 😉

  • ¿Cuál es tu pasión? 
  • ¿Cuál es el motor a la acción en tu vida?
  • ¿Qué es lo que se te da bien, lo que hace que te levantes todas las mañanas, lo que te emociona y te lleva a la acción?
  • ¿Qué te encanta aprender?
  • ¿En qué estarías dispuesto a dedicar tu tiempo y esfuerzo sin cobrar dinero a cambio.
  • ¿Por qué estarías dispuesto a hacerlo? ¿Qué es lo que te llena de ello?

Conocerse a uno mismo es algo más difícil de lo que parece. ¿Cuándo fue la última vez que te sentaste media hora a reflexionar sobre ti, sobre lo que quieres, sobre tu vida?

 

¿Cuándo y cómo perdemos la motivación?

Primero, todo parte de nuestra identidad, de nuestras necesidades como humanos.

¿Qué necesidades tenemos?

  • Necesidades básicas
  • Necesidades y deseos más elevados

Necesidades más básicas a necesidades más elevadas:

  • Fisiología: respiración, alimentación, descanso, sexo, etc… 
  • Seguridad: física, laboral, familiar, salud, privada, etc…
  • Afiliación: amistad, afecto, intimidad, etc…
  • Reconocimiento: autoconocimiento, confianza, respeto, éxito.
  • Autorrealización: moralidad, creatividad, crecimiento y desarrollo personal, desarrollo espiritual, moral, la búsqueda de una misión en la vida, la conexión con tu ikigai, etc.

Pon en “jerarquía” tus necesidades

Párate un segundo. Pregúntate. 

¿Estás cubriendo tus necesidades primarias?

¿Estás cultivando y elevando tus necesidades esenciales?

 

Para aspirar a las necesidades esenciales, las más elevadas, a las que te llevan a la autorrealización y transformación, antes han de atenderse las necesidades primarias, como la alimentación, el descanso, el sentimiento de seguridad, etc…

Necesidades más básicas, son las necesidades deficitarias y las necesidades más elevadas, son las necesidades de desarrollo del ser. Con el deseo de crecer como persona.

 

Para vivir desde tu máxima motivación, y realización, desde tu máximo esplendor, es importante cubrir las necesidades que te aporten en tu desarrollo personal y autorrealización. 

 

Para tu autorrealización es importante conectar con tu motivación, conectar con ese deseo innato que te hace que te muevas y te emocione. 

*Para más información mira la pirámide de Maslow. La pirámide de Maslow fue creada a partir del estudio de los casos excepcionales, más que de lo que resulta normal en las poblaciones humanas. Desde esta premisa creo la pirámide de las necesidades básicas y necesidades elevadas. 

 

¿Cuál es la causa, la raíz, de la desconexión de nuestra motivación?

La motivación por la vida, por aquel proyecto, por aquella relación, etc…

La motivación es aquella acción motora conectada a nuestros deseos, objetivos y sueños.

El camino inicia cuando perdemos nuestro valor, nuestro poder, cuando no damos importancia  a nuestras necesidades vitales, primarias y esenciales, cuando  nuestras necesidades diarias, no son cubiertas, y son abandonadas, damos el valor al otro, al mundo, no a nosotros. 

La raíz comienza ahí.

Desde ahí, conectamos con nuestra autoestima, nos sentimos desvalorizados (ojo y no es el otro, es como tu te has tratado, es como tu te has dado tus necesidades y has marcado tus límites), nos sentimos des-empoderados, nuestra confianza en nosotros no está empoderada, no estamos en nuestro máximo valor, y desde ahí, nuestra motivación, la acción a nuestro motivo, pierde energía, acción y dirección.

Entramos en un bucle entre la pérdida de valor, de confianza y de fuerza interna. Y nos desconectamos de nuestra motivación, el motor de nuestra acción por aquel objetivo, deseo, proyecto, relación, etc…

¿Y cómo salir de ese bucle?

  • Conecta con tu motivación, con aquello que te da la acción, a tu motivo, a tus deseos, sueños y objetivos. Con el motor de la acción hacia la dirección de tu intención. 
  • Alimenta tu confianza, tu autoestima, tu fuerza interna. 
  • Nutre tu alma.
  • Empodérate, reconócete en tus logros, en tus fortalezas.
  • Siéntete en tu esencia, en tu plenitud máxima, conectado a tu valor esencial, a tu pasión, a tus sueños y a tu propósito. 

 

Y tras salir del bucle… te preguntarás ¿Y ahora cómo cuido de mi poder y valor? 

Equilibra tus necesidades y tus límites. 

Pon fuerza, atención e intención en aquello que quieras, desees, en tu foco y en ti, cuida de aquello que quieras y cuida de tu energía, de tu poder, de tu valor. 

 

¿Cómo puedo reconectar con mi motivación?

La motivación es un motor alimentado por estímulos internos y externos que te ayudará a mantenerte firme en tu camino hacia la meta.

¿Pero cómo podemos encontrar la motivación con todo lo que estamos viviendo?

Encuentra o vuelve a conectar con tu motivo. Con tu causa. Aquello que te hace ir a la acción, lo que te emotiva y mueve.

Cultiva tu autoestima. Si nos encontramos más bajitos de ánimo, nuestra fuerza motora no está activa. Activa tu motor. Tu fuerza interna. Mima tu autoestima. Antes de cualquier acción, sube tu autoestima.

Alimenta el poder de la mente. Alimenta tus pensamientos positivos. Aparecerán pensamientos saboteadores, contrarresta esos pensamientos con pensamientos empoderadores.

Elabora tu diario personal de objetivos y logros. Reconoce tus logros. Celébralos. Valora el camino que estás desarrollando y siente como eres capaz de creer en ti y crear. Con tu motivación como el motor de la acción a tu logro.

Prepara una lista de beneficios y porqués para seguir motivado. Cuando tenemos claro el beneficio del objetivo, no hay pausa en nuestra causa 😉

Une tu pasión, tu porqué, tu objetivo. Tu motivación tendrá el fuel que necesita.

A esa fuerza interna que nos impulsa a realizar las acciones determinadas para conseguir nuestros objetivos y metas.

A por ello;)!

 

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Me encantará leerte en comentarios.

Abrazo, Pau. ?

 

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